DIARIO VASCO 19.04.09 -
P. A.
La caída de la actividad registrada por Irizar en el primer trimestre del año ha tenido su reflejo en los salarios de sus trabajadores, ya que el Grupo ha decidido reducir el sueldo de los mismos un 10% durante un año para poder afrontar la crisis.
La empresa carrocera sigue así la estela de otras cooperativas, en concreto del Grupo Mondragón, del que se desgajó a mediados del año pasado, que decidieron congelar o rebajar los ingresos de los cooperativistas para poder sortear el temporal. Medida que está siendo también imitada por otras empresas no cooperativistas afectadas por la crisis.
En el caso de Irizar, la decisión se tomó en febrero.
Como es lógico, el descenso ha tenido su reflejo en el ritmo de producción de la factoría, que ha ido reduciendo paulatinamente el número de autocares diarios que salen de la planta de Ormaiztegi. Así, en estos momentos están saliendo una media de 4,5 autocares diarios, lejos de los 7,5 autobuses que fabricaban en los momentos de mayor producción.
Al tratarse de una cooperativa, con la peculiaridad del modelo de gestión de Irizar, basada en la autogestión y en una gran flexibilidad para adptarse a las diferentes circunstancias, Irizar ha hecho frente a esta situación sin adoptar medidas traumáticas en lo que respecta al personal. De hecho, apunta que ha mantenido todos los empleos, y que incluso a principios de año integró en la plantilla de fijos a cuarenta trabajadores eventuales, tal y como tenía previsto.
No obstante, ha aprovechado las vacaciones de Semana Santa para parar la producción de autocares durante dos semanas, con el objetivo de dar salida al stock acumulado. Así, dentro de la gran flexibilidad con la que trabajan se ha dejado descansar a los trabajadores que acumulaban más horas, mientras que otros que se encuadran en el denominado Grupo de Recuperación, se han dedicado a dar los últimos retoques a los últimos autobuses, para que estuvieran listos para ser entregados.
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